lunes, 17 de enero de 2011

La vida sexual de las gallinas

Dalí: Niño mirando el nacimiento del nuevo hombre


En serio, no lo entiendo. Tantos años vividos y no fue hasta hace unos días que me vino el problema a la quijotera. Me encontraba comiendo un hermoso pollo campero. Son enormes  y cada uno cuesta como dos paletillas de cordero. Será pour le prix o por lo que sea pero me vinieron a la mente (por cierto, cada día más trastornada) unas preguntas acerca del pollo (campero, sin metáfora).
-- ¿Cómo surgen los pollos? ¿Cómo se reproducen las gallinas? ¿Qué hacen los gallos para tener hijitos amb las gallinas?
Sorprendí al resto de los comensales, en realidad eran unas preguntas que me hacía e iban dirigidas a todos y a nadie.
-- ¿Qué dices? --dijo uno de ellos.
-- Pues eso, que llevamos toda la vida comiendo estos animalitos y no sé nada de sus vidas.
Y a partir de ahí empezaron a surgir un montón de preguntas porque, queridos, antes de comerte algo o alguien (¿son "alguien" los pollitos?) debes saber algo de lo que te llevas entre dientes.
Existen varios grupos: pollos y su femenino, gallinas y gallos.Todos los pollos/as no llegan a gallos y/o a gallinas, pero hay muchos más que gallos y gallinas. ¿Ellas están siempre dándole al asunto? ¿De ahí que se diga "eres más puta que las gallinas"?
Contaba una persona que tenía determinados conocimientos sobre el asunto que cuando una gallina estaba "clueca" es que había sido montada y entonces se le retiraban los huevos para que los cuidara dándoles su calor de madre.
-- Pero ¿cómo se sabía el momento en que había ocurrido ello?
-- No se sabía.
Nos miramos asustados.
-- Entonces ¿puede que durante un tiempo comiéramos huevos con pollito? Bueno que creyéramos que nos estábamos comiendo un plato de huevo con patatas fritas y fuera en realidad un plato combinado, más combinado aún?
-- Puede.
 El terror se apoderó de mí (y del resto de los comensales). Se me abrieron las carnes. Porque también es una cuestión de huevos, de cuáles están o no fecundados y cuáles te puedes comer con absoluta tranquilidad y cuáles no. Me vinieron tantas y tantas preguntas...
-- ¿De quién dependen los pollitos, de mamá o de papá? ¿Quién pone las ganas?
-- No lo sé.
-- ¿Por qué hay tantos pollos y tan pocos gallos? ¿Cómo se lo montan con las gallinas? ¿Cuántos gallos para cuántas gallinas?
-- Vaya preguntas.
No me gustaba acosar a un invitado que no tenía respuestas para todo.
--Lo que sí recuerdo, dijo de repente, es que las gallinas no aguantaban mucho con sus huevos y había que ponerles una pava que eran mejores para empollar.
-- ¿Por qué?
-- Porque eran más tranquilas. Las gallinas siempre terminaban yéndose, sin embargo las pavas eran más fiables.
-- ¿Dónde se iban las gallinas?
-- Pues a su necesidad.
El experto se sentía incómodo. No había que seguir haciendo preguntas. Aunque yo necesitaba respuestas. Empecé a vislumbrar todo un mundo alucinante con una didáctica extraordinaria. Ni Esopo con toda su parafernalia. "Eres más puta que las gallinas". "Eres una pava". "Eres un gallito". Si todo el lenguaje cotidiano está lleno de estas sabidurías populares. Vamos que ni Orwell hace una alegoría mejor. ¿Qué digo Orwell? Ni siquiera Platón que era un experto en esto de las alegorías.
He estado considerando el mundo de las gallinas y he meditado sobre las diferncias entre las de corral y las industriales. He considerado asimismo la triste suerte de los pollos/as. Pero ahora me hago una pregunta que me inquieta: ¿dónde están los gallos? Porque éste es un mundo de mujeres y bebés. ¿Dónde se meten ellos? Puede que estén dándose contínuas bacanales en una serie infinita de orgías. Si lo hubieran decidido así  en una decisión de libre albedrío o hubieran sido llevados a ella en virtud del ciego impulso propio de su naturaleza, pues bien.
Pero ¿y si no fuera así? ¿Y si por cuestiones mercantiles se vieran obligados a cubrir a todas las gallinas para engendrar todos los pollitos (y pollitas, utilizaré el diminutivo para que no suene fatal). Entonces su vida sería más terrorífica encore que la de las pobres gallinas. Tener que montárselo siempre sin deseo, una y otra vez...
Son tantas y tantas las preguntas... Habré de hacer largas y solitarias meditaciones sobre el asunto en cuestión...



Eurythmics: There must be an angel





¡Colifatos unidos, jamás serán vencidos!




2 comentarios:

  1. El presidente de EEUU Calvin Coolidge, visitó una granja avícola en compañía de su mujer (aunque la visita la hacían por separado). En un momento dado, la Primera Dama preguntó extrañada cómo un solo gallo podía cubrir a tantas gallinas. Los operarios le explicaron con orgullo que el animal “cumplía con su deber” un buen número de veces al día. “Deberían comentárselo al Presidente” dijo ella con ironía. Cuando fue informado, éste preguntó: “¿cubre siempre a la misma gallina?” “No, señor; siempre a una gallina distinta”. “Deberían informar de esto a la Primera Dama”, repuso el Presidente. Los Psicólogos han denominado “Efecto Coolidge” al incremento del interés del macho ante una compañera sexual distinta de la habitual.
    Que sí, que sí, que ya está bien de discriminar. Que al gallo le gusta cambiar de pareja para ser más eficiente, pues vale. Pero me digo yo que seguro que también a la gallina le gusta cambiar de gallo todas las veces que haga falta. Que ya es hora de empezar la lucha por la liberación sexual de las gallinas. ¡¡¡Vivan las gallinas libres!!!.

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  2. Pues es un tema interesante. Constantemente me encuentro con urbanitas que piensan que del huevo, tal cual, sale un pollo, a condición de no comerlo en el acto y que pase por un periodo de incubación, relegando al macho del corral a una labor meramente de despertador y tostón mañanero.

    En el tema de aves de corral, me estoy haciendo casi una especialista, no sé sí conseguiré algún día avanzar en el delicado asunto de distinguir el sexo de los pollitos soplándoles en el culete. Porque cuando son grandes está claro: la que pone huevos es gallina y el que canta kikiriki y se abalanza constantemente sobre la ponedora es gallo. Ella se resiste, eriza sus plumas y le planta cara, como intuyendo que tal gallardía apenas durará unos cuantos segundos, molesta con la excesiva prepotencia del macho, "tanto ruido para tan pocas nueces" debe pensar. Los gallos, por muy gallitos que sean no pasan de eyaculadores precoces. Parece ser que el gallo necesita innumerables encuentros por la escasa satisfacción sexual que obtiene en ellos. Entonces, para la buena marcha de un gallinero casero y a fin de no estresar a las damas y que el ego del macho no sea vea mermado, es recomendable un gallo por cada 7 u 8 gallinas.

    Aclarar que un gallo no es más que un pollo adulto, por sí aún había dudas sobre esto. Al igual que una gallina es una pollita desarrollada. Sí hay más pollos que gallos es porque los primeros se sacrifican para negocio y consumo alimenticio.
    Y otra aclaración, la gallina se pone clueca, independientemente de que haya sido fecundada, es una cuestión hormonal, no de "preñez". Se puede aprovechar esta disponibilidad para que incube huevos fecundados de cualquier otra gallina.
    Mi gallina Catalina se puso clueca dos veces en un año y sin haber conocido varón. En la segunda vez, nos propusimos hacer realidad sus sueños maternales y le conseguimos 7 huevos fecundados de a saber que madres y padres biológicos. A los 21 días nacieron seis pollitos y pollitas, que ahora son 2 gallos y 4 gallinas, uno no pasó de huevo. Mi Catalina, convertida en una altruista madre de alquiler, ejemplar, estuvo pendiente de sus hijit@s en todo momento desde que inició la incubación, hasta que un buen día, con dos meses de vida, les obligó a emanciparse.
    Por cierto ahora nos sobra un gallo, es precioso, con un plumaje muy colorido del rojo al azulado, sí no le encontramos pronto un corral de acogida terminará en la cazuela, o ambos acabarán mal heridos en la lucha por el liderazgo y la reafirmación del ego. Otra cosa, en los huevos fecundados que no son incubados no se produce desarrollo alguno del embrión y son totalmente aptos para el consumo.

    Sobre las gallinas, como sobre todo lo femenino, se ha adoptado históricamente un denigrante lenguaje sexista. No es que sean putas, es que son muy fértiles. Y de cobardes no tienen nada, os lo aseguro.

    Y os dejo para terminar, un enlace con un tema musical ilustrativo

    http://www.youtube.com/watch?v=CK82O0ATtzg

    Les Luthiers: "La gallina dijo eureka"

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