viernes, 28 de junio de 2013

50 años de Rayuela


Mi "Rayuelita"

Julio Cortázar













"¿Encontraría a la Maga? Tantas veces me había bastado asomarme, viniendo por la rue de Seine, al arco que da al Quai de Conti, y apenas la luz de ceniza y olivo que flota sobre el río me dejaba distinguir las formas, ya su silueta delgada se inscribía en el Pont des Arts, a veces andando de un lado a otro, a veces detenida en el pretil de hierro, inclinada sobre el agua. Y era tan natural cruzar la calle, subir los peldaños del puente, entrar en su delgada cintura y acercarme a la Maga que sonreía sin sorpresa, convencida como yo de que un encuentro casual era lo menos casual en nuestras vidas, y que la gente que se da citas precisas es la misma que necesita papel rayado para escribirse o que aprieta desde abajo el tubo del dentrífico".

El día 28 de Junio de 1963 vio la luz la primera edición de Rayuela, hoy hace 50 años. No es la mejor novela que he leído pero sí la que más me ha deslumbrado desde que la leí por primera vez. Me resultó fascinante, me llenó de entusiasmo. Hace mucho tiempo de eso. Compré por primera vez la novela allá en el Pleistoceno, ni siquiera recuerdo la editorial. Lo que sí recuerdo es que desapareció en el camino, tal vez la presté o quién sabe. Más tarde compré la de Edhasa, esa que lleva en la portada la fotografía que Sara Facio le hizo a Cortázar y en pequeño la rayuelita. Hace un par de años me di cuenta de lo deteriorada que estaba, las hojas amarillas, totalmente suelta, más parecida a un acordeón que a una novela. Mucha gente leyó este ejemplar y eso me encanta, la conservo como un tesoro, pero decidí comprar mi tercera Rayuela, la de Alfaguara. Y hace poco comencé una nueva lectura de esta obra que conservo ligada a mi piel y a mi alma.
Lo que más me gusta de Cortázar son sus cuentos, pero le sigo siendo fiel a esta novela que tan adentro me ha llegado. Los encuentros "casuales" entre Oliveira y la Maga me hacían, me siguen haciendo saltar del asiento, me llenan de alegría. Imagino mi París, esa ciudad que he ido descubriendo en cada viaje, imagino los lugares donde se sorprendían, los lugares que frecuentaban. En este blog he dado repetidas muestras de mi entusiasmo por un tal Julio y por una ciudad, París. Y la pata que le sale en el capítulo 62 que se convierte en una otra novela, 62. Modelo para armar (¿por que entré en el restaurante Polidor?).
Creo que es una novela a releer para todos aquellos que la leímos en nuestra juventud y a descubrir por nuevas generaciones. El lado de allá y El lado de acá, París y Buenos Aires... No se puede pedir más.
No, no es la mejor novela que he leído, pero sí una de las que más feliz me ha hecho y me sigue haciendo. Y el paso del tiempo... Bueno que 50 años es nada.


Charlie Parker - All the things your are 

Charlie Parker - Lover man






1 comentario:

  1. No recuerdo a qué edad leí Rayuela, sólo que era muy joven. Lo que sí recuerdo fue la sensación que tuve al leerla. Me descubrió un mundo mágico, me llenó de ilusión y esperanza. Me sentía libre hacia varios caminos, varios mundos y miles de posibilidades. Un horizonte infinito me descubrió Cortázar con este inclasificable libro. Me abrió a su universo y al mío y por eso le doy las gracias.

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